¿Las aseguradoras cubren daños por conducir bajo el efecto de sustancias?

¿Las aseguradoras cubren daños por conducir bajo el efecto de sustancias?

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Si bien los automóviles juegan un papel crucial en la vida moderna, hay que reconocer que usarlos constituye un riesgo. Y aunque la prudencia es la clave para evitar muchos accidentes, algunas veces las prácticas irresponsables de otros en la vía pueden dar un vuelco en las vidas de las personas. He allí tan solo una porción de la explicación detrás de tantas leyes de tránsito y de la penalidad en su incumplimiento.

Y es que más allá de los daños materiales — que muchas veces cubre el seguro del vehículo —, esto puede tener serias implicaciones en la vida de los conductores. Por ejemplo, limitaciones a corto y mediano plazo en su permiso para conducir, así como demandas de parte de los afectados y demás. Las probabilidades de que ello ocurra aumentan exponencialmente cuando hay efectos de sustancias de por medio.

Lo ideal sería evitar este escenario a toda costa y una buena forma de hacerlo es conocer las consecuencias a nivel legal, no solo a corto sino también a largo plazo. Como expertos en el área, ofrecemos el siguiente artículo con información detallada sobre estas así como los procedimientos a seguir en caso de vivir una experiencia de este tipo.

DUI vs. DWI: ¿Cuál es la diferencia?

Lo primero es definir y diferenciar dos términos que suelen usarse indistintamente en el lenguaje común: conducir bajo la influencia (DUI, según siglas en inglés) y conducir en estado de ebriedad (DWI, según siglas en inglés).

DUI es un término genérico que engloba delitos de conducción bajo influencia del alcohol y/o de alguna droga, desde lícita hasta ilícita; esto incluiría también medicamentos de venta libre, aquellos debidamente recetados por profesionales de la salud o bien las drogas ilegales. Por su parte, DWI se utiliza para hacer referencia exclusiva a la conducción bajo influencia del alcohol o en estado de ebriedad severo.

Dicho esto, en ocasiones el uso de DUI podría no hacer diferencia si el contexto fuera DWI; sin embargo, usar este último nos llevaría a un caso muy específico que a nivel legal también puede hacer la diferencia.

Pero sea cual sea el caso, los cargos por DUI y DWI los coloca un oficial que, previo estudio, considera que una persona se encuentra incapacitada para conducir debido al efecto de alguna de estas sustancias.

Consecuencias de cargos por conducir bajo influencia

Unas de las principales preocupaciones al momento de un accidente de tránsito son los daños del o los vehículos implicados. Es bien sabido que las pólizas de seguro de automóvil pueden cubrir la mayoría o todos los daños derivados; sin embargo, la historia cambia cuando el alcohol o las drogas juegan un papel en la historia.

Las consecuencias dependerán mucho de la empresa proveedora del seguro y del estado de Estados Unidos (EEUU) en que se suscite el accidente. Pero en general, si se comprueba que se trata de un caso DUI, se puede esperar desde la cancelación de la póliza hasta la negación de futuras coberturas a futuro debido a la trayectoria. Todo dependerá de las circunstancias y las leyes en juego.

Los argumentos de las empresas proveedoras de póliza de seguro de automóviles

Es cierto que muchas empresas aseguradoras ofrecen pólizas que cubren cualquier accidente en el que el titular, o la persona beneficiada, haya conducido de manera negligente o imprudente. Esto sería una gran ventaja para casos en que las personas que estaban medicadas por alguna razón de salud o aquellas que fueron afectadas por la somnolencia.

Ahora bien, independientemente de que haya o no intención en las condiciones que propiciaron el accidente, la aseguradora seguirá funcionamiento como un negocio basado en rentabilidad. Antes de asumir cualquier responsabilidad por daños, sus representantes harán una investigación minuciosa para determinar las circunstancias en las que ocurrió el accidente. Destacamos ello porque, aunque la cobertura sea amplia, no incluiría accidentes automovilísticos causados ​​por una conducta intencional.

Y es que un argumento común de dichas empresas es que las personas están conscientes la mayoría de las veces de que el alcohol y el volante no son una buena combinación. Bajo este supuesto, fácilmente podrían indicar que el conductor se puso en peligro intencionalmente al conducir su automóvil en estado de ebriedad o de estimulación. Y, de resultar válido, con ello se liberarían de los gastos derivados de los daños causados al vehículo y las lesiones ocasionadas a las personas implicadas.

Denegación de cobertura del seguro del automóvil

Cuando hay cargos de DUI tras un accidente automovilístico, siempre habrá investigaciones. Si después de ellas, la aseguradora determina que el titular o beneficiario de la póliza actuó intencionalmente al beber o consumir sustancias, es de esperar que se niegue a cubrir los gastos del contrato.

La decisión es, ciertamente, bastante drástica. Ahora bien, las estadísticas muestran que esta insistencia por zafarse de la responsabilidad se intensifica cuando el titular espera cubrir lesiones a los otros conductores o pasajeros afectados por el accidente; en estos casos, sería más prudente contratar un abogado. La experiencia indica que tienden a ser más flexibles cuando solo se busca cubrir los daños ocasionados en el vehículo cubierto por la póliza.

Limitación de cobertura del seguro del automóvil

Un escenario quizás menos sombrío sería el de una limitación de la cobertura del seguro del automóvil en caso de un accidente por DUI. En efecto, hay situaciones en las que las aseguradoras pueden cumplir con su parte del contrato sin mayores problemas, particularmente cuando solo hay daños físicos al vehículo cubierto.

Pero una vez más, los problemas llegan cuando la los cargos hacen alusión a actos intencionales y haber bebido o consumido sustancias puede dar peso a este argumento.

En un accidente automovilístico es lógico que surjan reclamos por lesiones personales. Los afectados pueden apoyarse del hecho de que el conductor asegurado no había tomado las previsiones pertinentes para la actividad. A esto se le conoce como agravio intencional y es una excepción a la asunción general de que la mayoría de las personas y empresas no actúan con intención de causar daños personales.

Si el caso se llevara a un juicio y el jurado otorga al o los demandantes una indemnización por agravio intencional de parte del conductor, la aseguradora tampoco asumirá los gastos. En conclusión, si se demuestra intención detrás del caso DUI, entonces las consecuencias serían muy similares a las de no haber tenido una póliza de vehículo.

Cancelación permanente de la póliza

Los escenarios descritos hasta el momento hacen referencia a mayoritariamente a implicaciones a corto y mediano plazo. Pero conducir en estado de ebriedad o bajo el efecto de narcóticos no solo puede causar gastos millonarios por indemnización; también podría limitar el acceso del titular a beneficios similares a futuro.

Desde el momento en que ocurre el veredicto de indemnización por DUI, el conductor entra en un grupo de riesgo para la aseguradora. Puede que muchos negocios inicien a través de riesgos, pero las empresas conocen muy bien las implicaciones de los accidentes automovilísticos de este estilo.

Para ellas, no sería rentable a futuro ofrecer una cobertura tan amplia a un individuo que actuó “con intención” en los daños; la evaluación de riesgos y beneficios probablemente no sea suficiente motivación para renovar un contrato de este estilo, por lo que podrían cancelar la cobertura.

Aumento de la prima de la póliza de seguro

Pese a ello, las autoridades entienden el papel de los vehículos en nuestra sociedad y la importancia de las aseguradoras para sus usuarios. Es por ello que, en la mayoría de los estados, las pólizas de seguro de automóviles están reguladas de modo que no sea tan simple desamparar a los titulares.

Incluso en casos en los que la evidencia o circunstancias sugieran que el conductor actuó intencionalmente al conducir ebrio o afectado por drogas, puede ser difícil que la empresa se desvincule de los gastos si hay leyes que lo impiden.

Ahora bien, si no lo hace, intentará compensarlo de alguna forma como garantía a futuro. Entre las medidas comunes está el incremento de las primas después de una condena por conducir influenciado por sustancias. Esto aplicará tanto para la misma empresa o para otras puesto que cada cliente tiene un historial que estudian internamente.

¿Qué hacer ante una condena por DUI?

Antes de obtener una licencia para conducir, existen varias capacitaciones para entrenar la habilidad frente al volante y concienciar sobre las leyes en carretera. Entre todos estos temas se habla mucho de la influencia del alcohol, de los alucinógenos, los medicamentos y la somnolencia al momento de conducir.

Irónicamente, pocos toman en consideración las implicaciones de un accidente derivado de estas condiciones. Como expertos en el tema, cumplimos con educar al público respecto a ello. Pero al mismo tiempo recordamos que, en cualquiera de los casos, vale contar con una asesoría legal de calidad.

Nuestro bufete está conformado por un equipo altamente capacitado y con toda la disposición de apoyarle en esta u otro tipo de situaciones. ¿Hay alguna consulta que plantear? Haga clic aquí y póngase en contacto.